La citada compañía, especializada en seguros de viaje, aconseja a todos los mayores huir de la precipitación a la hora de decidir emprender unas vacaciones y adoptar unas medidas generales de prevención que eviten posteriormente problemas.

Según fuentes de la aseguradora, las personas con tendencia a caers con facilidad, las que presenten irregularidades en electrocardiogramas y aquellas con frecuentes olvidos deben evitar desplazarse de vacaciones en viajes convencionales. Para ellos se aconsejan los viajes específicos para la tercera edad, como los organizados por el Inserso.

Europea de Seguros desaconseja para los mayores los viajes individuales con programas sobrecargados, sin días de descanso intercalados entre una y otra actividad, así como los destinos a lugares con climas extremos.

La asegradora recomienda además que las personas de edad más avanzada se desplacen acompañadas, sobre todo si padecen algún tipo de enfermedad que limite alguna de sus capacidades.

Según la Compañía Europea de Seguros, a pesar de que a los mayores les preocupa mucho disponer de un servicio de atención médica permanente y la posibilidad de contar con un teléfono de asistencia durante las 24 horas del día para prevenir cualquier contratiempo, son proclives durante sus viajes a saltarse dietas y a olvidar tomarlas medicinas. Esta circunstancia y los cambios de horario pueden ser factores que desestabilicen procesos crónicos que estaban bajo control médico.