En unas declaraciones a la Cadena Ser, Chaves respondió al principal partido de la oposición, desde el que se tildó de "cobarde" al PSOE por no parar el Estatuto de Cataluña, que "si hay que hablar de cobardes, cobardes son los que llevaron a muchos soldados españoles a Iraq engañándolos totalmente".

En su opinión, el partido que preside Mariano Rajoy es "bastante responsable", aunque sea "subliminalmente", del boicot a productos catalanes, por lo que pidió "normalizar el debate, hacer un ejercicio de madurez", y no lanzar el discurso "apocalíptico, que es lo que ha crispado el ambiente, de que España se hunde, se desploma, que se ha roto el pacto constitucional".

No obstante, considera que el PP "está pasando de un discurso apocalíptico, propio de una derecha radical pura y dura, de que España se rompe y el Estatuto de Cataluña favorece la poligamia o reconoce los asesinatos piadosos a un discurso en el que acepta la negociación aunque pida una negociación global".

"No es de recibo la estrategia del PP de situar Cataluña como un problema para el resto de los españoles y que los catalanes se sientan agredidos por este debate", agregó. "Si Rajoy está en una línea de que se puede modificar y se debe modificar en el Congreso, lo importante es que se comprometa al proceso de negociación".

Reiteró que "lo importante es que no se autoexcluya del proceso de negociación, y que no puede ser un diálogo excluyente del resto de los partidos políticos, no hay que rechazar a priori ninguna posición", porque las formaciones catalanas "algo tendrán que decir" de la reforma del Estatuto de Cataluña.

El presidente andaluz indicó que la propuesta de Estatuto de Cataluña contiene "aspectos inconstitucionales, no responde a los intereses generales de todos los españoles y, en consecuencia, debe ser modificado en algunos aspectos dentro del Congreso de los Diputados", hasta que sea "plenamente constitucional y con el que todos nos sintamos cómodos".

NI NACION NI FINANCIACION

"El término nación, financiación autonómica, unidad de mercado, gestión de la Seguridad Social... Hay cuatro o cinco aspectos que deben ser cambiados", y todos los partidos, en el PP "parece que hay una modulación por parte del señor Rajoy, deben a entrar en un proceso de negociación, de diálogo, que dé como resultado un pacto".

Sobre el concepto de "nación", dijo que hay que "encontrar un punto de encuentro entre ese sentimiento que tienen la mayoría de los catalanes y el de la mayoría de los españoles, y creo que no puede ser el término nación, que también puede sembrar dudas de constitucionalidad, sino otro que sea cómodo para todos los españoles, incluidos los catalanes".

Preguntado por la posición ante este debate de los distintos miembros de su partido, aseguró que "defendemos el mismo modelo de Estado, el que figura en el Título VIII de la Constitución", y en el seno del PSOE ha habido más "problemas de intensidad, de vehemencia, de palabras que se han utilizado, que problemas de fondo".

"En el fondo hemos estado todos de acuerdo", añadió Chaves, quien respondió que también las relaciones con el presidente de la Generalitat, Pasqual Maragall, son "muy normales, de dos personas que pertenecen al mismo partido, de respeto".

NO VICIAR EL DEBATE

Por otro lado, Chaves advirtió de que el Debate sobre el Estado de las Autonomías que comienza mañana en el Senado no debería estar viciado por el Estatuto catalán, que "ha tenido ya su debate donde debía tenerlo, es decir en el Congreso de los Diputados", y el de la Cámara Alta "debe ser diferente".

"Es un debate sobre sobre el Estado, sobre España, sobre el modelo territorial y de todas y cada una de las comunidades", prosiguió. "Yo no voy a hablar de Cataluña, voy ahablar de España, donde está integrada Cataluña, y voy a hablar también de Andalucía, y de hacer compatibles los intereses y derechos de los andaluces con los del resto de los españoles".

En cuanto a la ausencia del "lehendakari", Juan José Ibarretxe, del debate autonómico, opinó que es una "excusa" argumentar que no se aprobó su propuesta de reforma estatutaria, y que "sería bueno" que asistiera a la Cámara Alta "para defender sus posiciones y, con toda legitimidad, su modelo de Estado".