En la resolución, el CES señala que el fin de la 'guerra fría', la moratoria de pruebas nucleares iniciada en 1991 -a la que se han ido sumando distintos países- y más recientemente la prórroga indefinida del Tratado de No Proliferación Nuclear alcanzada hace apenas cuatro meses, hicieron concebir a la humanidad nuevas expectativas para avanzar en la prohibición total de pruebas nucleare, hasta alcanzar un desarme atómico multilateral.

"Sin embargo", añade el CES, "la continuación en la realización de pruebas atómicas por parte de algunos países, y la ruptura de la moratoria que supone las recientes explosiones llevadas a cabo en Mururoa, alejan la posibilidad y la oportunidad histórica de avanzar hacia un mundo más pacífico en el que la seguridad no se base en el miedo al poder atómico del contrario, sino precisamente en su inesistencia".

El Consejo Económico y Social acordó tabién transmitir a los gobiernos de estos países su protesta por la continuación de sus programas nucleares y pide al Gobierno español que se comprometa a impulsar ante los gobiernos de la UE el tratado de prohibición total de pruebas nucleares.