La huelga, que ha sido convocada contra el Plan de Empresa de Renfe para 1992y 1993, en el que se prevé una reducción mínima de 1.600 empleos, sólo tiene el respaldo de CCOO y CGT, ya que UGT y el sindicato de maquinistas SEMAF se han descolgado a última hora.

En cercanías, los servicios mínimos afectarán al 75 por ciento de los trenes que circulan de seis a nueve de la mañana, y al 50 por cien de los que funcionan entre las seis y media de la tarde y las nueve y media de la noche.

En largo recorrido, funcionará al menos un tren en cada dirección, y en mercancías, se garatizará la circulación de los convoyes que realizan el transporte de ganado trashumante, en plena actividad en este último mes de primavera.

En cuanto al AVE, los mínimos garantizarán la salida de los trenes previstos a las 7, 8, 15 y 18 horas en la dirección de Madrid a Sevilla, y a las 7, 11 y 19 horas en el sentido contrario. Normalmente, funcionan siete trenes en cada dirección.

Renfe, según las fuentes consultadas por esta agencia, considera que en el paro de mañana priman consideraciones extalaborales y no la falta de diálogo sobre el plan de empresa aducida por los sindicatos convocantes,

Por su parte, un portavoz de CCOO indicó que Renfe no sólo no ha negociado el plan de empresa, sino que tampoco ha cumplido el convenio colectivo en vigor para este año, que preveía, según el sindicato, la conversión de 500 empleados temporales en fijos durante el primer trimestre.

El mismo portavoz afirmó no comprender la decisión de UGT de no respaldar la huelga, ya que Renfe no ha variado el pln de empresa. La huelga de mañana será continuada con paros de una hora en los tres turnos de trabajo durante los días 10, 12, 24 y 26 de junio.