La actualización de balances llevada a cabo por la petrolera ha supuesto un aumento del 24% en las amortizaciones el inmovilizado llevadas a cabo, situando el resultado operativo del grupo en cerca de 10.500 millones de pesetas, un 16% más del registrado en el primer cuarto del año pasado.

Los responsables de Cepsa justifican la mejora de resultados en que en el primer trimestre de este año no se registraron algunas circunstancias desfavorables de 1996, y además se redujeron partidas como el esfuerzo inversor junto a una política de contención de costes y un aumento de la actividad del grupo.

Los márgenes en a actividad de refino fueron algo inferiores a los del primer trimestre de 1996, lo que se ha compensado por la fortaleza del dólar, con una cotización media de 140 pesetas frente a las 124 del mismo periodo del año pasado. También se han mejorado los márgenes comerciales, en contra de la tendencia de los meses anteriores permitiendo un resultado en la actividad de petróleo de 7.100 millones de pesetas.

En petroquímica, las ventas aumentaron un 8% con un resultado operativo de 3.368 millones de peseta, dejándose notar un repunte en esta actividad industrial que se viene confirmando en los meses siguientes y que permite vislumbrar, según Cepsa, el final de un ciclo negativo para la industria química.

Entre enero y febrero, la petrolera que preside Carlos Pérez de Bricio acometió unas inversiones de 7.306 millones de pesetas, destinados a las instalaciones de la refinería 'Gibraltar', seguir con el proyecto de exploración y producción en Argelia y mejorar y ampliar la red de distribución en España yPortugal.

Además, la petrolera prepara su ofensiva en el mercado del gas embotellado con el montaje de nuevas instalaciones de plantas industriales y de distribución destinadas a esta actividad.

Para el conjunto de 1997, Cepsa prevé invertir 40.600 millones de pesetas, cifra inferior a los 59.216 millones de 1996, lo que se debe a la conclusión de grandes proyectos de inversión de años anteriores.