La patronal analizó ayer la sentencia del alto tribunal, y tras comprobar que el texto normativo de 1993 reproduce fielmente la antigua regulación, solicitó la promulgación de una nueva ley.

CEOE recibió "con satisfacción" la decisión del Tribunal Constitucional, ya que a su juicio consagra plenamente un modelo organizativo empresarial basado en el principio irrenunciable de la libertad de asociación.

No ostante, CEOE aseguró que su petición de una nueva norma no debe implicar la desaparición de las cámaras de comercio, sino un nuevo modelo adaptado a las exigencias constitucionales "de manera que puedan seguir prestando los servicios que le son propios".

La patronal se ofreció a asesorar a las empresas que lo demanden "para que puedan hacer efectivo el principio de libertad de asociación".