CEOE CONSIDERA QUE EL RECORTE EN EL GASTO PUBLICO ANUNCIADO POR GONZALEZ PARA 1993 ES INSUFICIENTE

MADRID
SERVIMEDIA

El vicepresidente de la CEOE Arturo Gil considera que el recorte en el gasto público de unos 600.000 millones de pesetas para 1993 anunciado esta semana por el presidente del Gobierno, Felipe González, en una entrevista concedida al periódico "The Wall Street Journal", es insuficiente.

En declaraciones realizadas a Servimedia, el responsable de la patronal emresarial insistió en que el recorte del gasto público es "absolutamente imprescindible", pero señaló que un recorte como el anunciado por González no permitirá cumplir los compromisos adquiridos por el Ejecutivo español en la "cumbre" de Maastricht.

A juicio de Gil, para lograr el objetivo fijado en el Plan de Convergencia del Gobierno de situar el déficit público en los próximos años en el 1 por ciento del PIB sería necesario realizar un recorte en el gasto público de entre 1,5 y 1,8 billones de peseas.

Gil se mostró contrario a que el recorte afecte a todas las partidas por igual e insistió en que es necesario mantener el compromiso de inversión en infraestructuras del 5 por ciento del PIB en los próximos años "para que nuestra economía funcione y vaya mejorando en el futuro".

El vicepresidente de la CEOE defendió la puesta en marcha de un plan de privatizaciones de empresas públicas, lo que, en su opinión, permitiría un importante ahorro en el gasto público al reducir las subvenciones a esas empresas y una mejora de los ingresos del Estado con su venta.

También destacó la necesidad de llevar a cabo un control más riguroso y una mejor gestión del Inem y de la sanidad que permita ir reduciendo el gasto en estos departamentos sin que por ello se reduzcan las prestaciones a las personas que realmente lo necesitan.

"La CEOE no es partidaria de reducir prestaciones unitariamente a quien verdaderamente demuestre su necesidad. Lo que sí pensamos es que con unos criterios más selectivos y on una gestión más eficaz los gastos se pueden reducir de manera sustancial sin mermar la prestación para la que están concebidos estos servicios", explicó.

Para Gil, todas estas medidas permitirían a la economía española "entrar en el camino de una posible competitividad", aunque matizó que, "por desgracia, yo creo que aun tomándolas, la economía española tardará como mínimo un año y medio en recuperar su pulso normal".

Explicó que la mejora de la economía dependerá también del comportamiento de sector exterior y de cómo evolucionen las economías de nuestros países competidores. "En cualquier caso", dijo, "yo creo que partiendo de una situación normal en los demás países, será necesario un plazo de un año y medio como mínimo para recuperarnos".

"APATIA TOTAL"

Gil definió la situación de la economía española como "de una apatía total" y dijo que "estamos en unos momentos de una baja real muy importante y de una baja psicológica total y absoluta en todos los sectores, motivada por la falta d expectativas".

A juicio del responsable de la patronal empresarial, España vive actualmente una fuerte recesión en la economía, tanto a nivel de la Administración como a nivel de las empresas, las familias, el ahorro y la inversión.

El vicepresidente de la CEOE considera que para acabar con esta situación es necesario llegar a acuerdos importantes entre todos los agentes sociales y económicos. No obstante, insistió en que "la responsabilidad de la política económica quien la tiene es el Gobierno Los demás podemos ayudar y dar ideas, pero al final las decisiones las toman el Ejecutivo y el Parlamento".

(SERVIMEDIA)
07 Ago 1992
NLV