Según informaron hoy a Servimedia fuentes del CSN, el suceso no provocó escape de radiactividad ni motivó que se activara el Plan de Emergencia.

La anomalí se detectó durante una revisión rutinaria de una modificación de diseño introducida en ambas centrales. El cambio de diseño se efectuó de forma deficiente, ya que no se tuvo en cuenta que en caso de fallar algunos componentes relacionados con el sistema de refrigeración se podía producir una reacción en cadena que dejaría fuera de servicio otros elementos.

A pesar de que esta situación no se produjo, el CSN obligó a deshacer la modificación de diseño en ambas centrales y clasificó el suceso en el Nivl 1, el único ocurrido este año en las centrales españoles incluido en la Escala Internacional de Sucesos.

En el momento de detectarse la anomalía, la unidad uno de Ascó funcionaba al 100 por cien de potencia y la unidad dos se encontraba en periodo de recarga.