Según informaron a Servimedia fuentes de ANAV, tras el incidente se suspendieron todas las visitas, que desde el comienzo de las actividades de las centrales ha llevado a más de 80.000 personas a conocer las instalaciones.

El pasado mes de abril, cuando se detectó el escape, se realizó un control de contaminación de los alumnos, profesores y del conductor que participaron en la visita del colegio de los Maristas de Gerona a la central. Sin embargo, los análisis descartaron cualquier tipo de contaminación.

Las centrales de Ascó y Vandellós II realizan rutas guiadas de una duración aproximada de entre 2 y 3 horas que están dirigidas especialmente a estudiantes de enseñanza secundaria, bachillerato y formación profesional, en las que se informa sobre la energía nuclear en general, las características de cada emplazamiento, el funcionamiento, la seguridad, la protección radiológica, la vigilancia medioambiental y los planes de emergencia. Desde su suspensión cautelar, no se ha reanudado el programa de visitas.