Cerca de 200 taxistas se concentraron a las 16 horas en la parroquia de Sant Fructuós, de Tarragona, donde se celebró el funeral por Diego Martínez, y en las calles más céntricas de la ciudad, mientras que otros 60 taxis más del área metropolitana de Barcelona lo hicieron ante el Gobierno Civil de esta ciudad.

La Coordinadora del Taxi, que agrupa a todos los sindicatos del secto, tiene previsto solicitar mañana al consejero de Gobernación de la Generalitat, Xavier Pomés, la negociación del Plan Integral de seguridad del Taxi, que incluye el derecho de admisión de los viajeros con el fin de evitar riesgos.

Por otra parte, unas 500 personas asistieron al funeral del taxista de Tarragona y otras 500 siguieron la homilía en el exterior de la iglesia de Sant Fructuós.

El presunto autor de la muerte del taxista, el joven de 20 años Eloy Sánchez Banús, ingresó ayer en la cárce tras ser interrogado durante dos horas por el titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona.

Eloy Sánchez fue detenido el pasado día 31 por la noche cerca de la playa del Miracle de Tarragona, y posteriormente condujo a la policía al lugar en el que había abandonado el cuerpo del taxista.