Tras la avalancha de ayer, cuando un grupo de unos 40 inmigrantes intentó pasar a Melilla, resultando cinco de ellos con heridas, la situación ha vuelto a la normalidad, según una fuente de la Delegación del Gobierno en la ciudad autónoma consultada hoy por Servimedia.

Tampoco se ha procedido a reforzar con más agentes la zona por la que se produjo el intento de salto. "Los trabajos de ultimación de la valla siguen su curso. Las medidas de seguridad en el perímetro fronterizo son las mismas", detalló un portavoz.

Los inmigrantes intentaron cruz la frontera en los tramos que aún no disponen de una tercera verja, que pretende blindar por completo el trazado.