A juicio de esta confederación de comerciantes minoristas, los grandes beneficiados serán los grandes grupos comerciales y de distribución, que podrán abrir sus establecimientos o centros comerciales con total libertad, favoreciendo la creación de monopolios y con la consiguiente merma del libre comercio y de la competencia.

Ante esta situación, Cecoma anunció que apelará a las Administraciones españolas competentes en la materia en busca de apoyo para un sector que, además de su importancia económica, vertebra la vida ciudadana con su actividad.

Además, los comerciantes de Madrid consideran que esta directiva atenta contra las competencias en materia de comercio que, en nuestro país, tienen transferidas las comunidades autónomas.