LA CEAR CONSIDERA "INCONCEBIBLE" MULTAR A LOS BARCOS QUE LLEVAN POLIZONES
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El presidente de la Comisión Española de Ayuda al Refugiado (CEAR) en Euskadi, Javier Galparsoro, manifestó hoy que las multas que se imponen a los barcos por desembarcar polizones en los puertos provocan que los capitanes se vean obligados a mantenerles a bordo y dificulten el trabajo a las asociaciones ue se encargan de atenderles, por miedo a la sanción.
En declaraciones a Servimedia, Galparsoro indicó que "sancionar a un transportista por el hecho de que se le meta dentro un polizón es inconcebible. Tener una o varias personas a bordo y no poder bajarlas de ninguna forma es terrible. La policía blinda estos casos, se ponen a pie de barco y allí no puede bajar nadie".
Explicó que la legislación española establece sanciones de hasta 30 millones de pesetas por la evasión de un polizón, mientras ue en Francia y otros países se impone la multa simplemente por llevar un polizón a bordo.
El presidente de CEAR en Euskadi añadió que esta situación obliga en muchas ocasiones a los tripulantes del barco a "cuidar, alimentar y mantener al polizón, lo que crea una tensión máxima y situaciones muy crispadas".
Por este motivo, los trabajadores de organizaciones que se encargan de atender a los polizones tienen cada vez más difícil subir a bordo del barco para intentar ayudar a los inmigrantes o refgiados, por el miedo de los capitanes a que suceda algo y se les imponga la sanción.
De esta forma, los barcos mantienen a los polizones de puerto en puerto, porque "en ningún sitio los quiere nadie", y su suerte "es imprevisible". Así, recordó que se han dado casos como el publicado en 1995 por la revista "Tiempo", en que ocho polizones fueron asesinados antes de llegar a puerto.
(SERVIMEDIA)
23 Nov 1999
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