Los responsables de Itaca aseguran que el proyecto, que discurre en los límits del Parque Nacional de Doñana, podría vulnerar diversas directrices comunitarias y otras normativas medioambientales sobvre conservación de la flora y la fauna en el ecosistema de la zona.

Los responsables de la CE, que aceptado la denuncia de la organización ecologista onubense, han anunciado la apertura de una investigación, para conocer los posibles riesgos mediomabientales derivados de la obra, aprobada meses a trás por el Parlamento y la Junta de Andalucía.

Tras conocerse la incitiva de Brselas, la Agencia del Medio Ambiente de Andalucía (AMA) ha decidido analizar los efectos del proyecto en el entorno de Doñana, y elaborar un informe que puede ser decisivo para que la CE emita un veredicto sobre la conveniencia o no de realizar la obra.