La rebaja no impide mantener el nivl de bonificación con que cuenta la financiación del CDTI, ni tampoco las condiciones en que se conceden estos préstamos, es decir, préstamos a largo plazo sin previa exigencia de garantías reales, siempre que los proyectos que los justifiquen sean viables técnica y económicamente.

Durante 1998, el CDTI comprometió un volumen de fondos de casi 29.000 millones de pesetas, el doble que en 1993, lo que supone un ritmo de crecimiento en los últimos 5 años del 15% anual.

Según el desglose de las ayuda concedidas, un tercio fue para iniciativas situadas en las regiones que están económicamente menos desarrolladas, es decir, con una renta inferior al 75% de la media en la UE, presentadas por empresas de menos de 50 empleados en el 47% de los casos.

El CDTI señala que sólo el 34% de las empresas españolas que invierten en I+D tienen este pequeño tamaño. El 53% de empresas que recibieron en 1998 financiación del CDTI entraron en contacto con este organismo por primera vez.