El CDS afirma que los inactivos se llevan la mitad del presupuesto -----------------------------------------------------------------

MADRID
SERVIMEDIA

El portavoz de Izquierda Unida en el Congreso, Ramón Espasa, pidió hoy un aumento de 850.000 millones de pesetas en e gasto público de 1992, durante el debate de los Presupuestos del Estado para 1992.

Esta es la propuesta más destacada de la segunda y última jornada del debate en el pleno del Congreso de los Presupuestos del Estado, que terminó con el rechazo de las enmiendas de totalidad presetadas por todos los grupos parlamentarios.

IU cree que el aumento del gasto que reclama puede financiarse por tres vías: 300.000 millones luchando más contra el fraude fiscal, 400.000 millones dejando el déficit del Estad para 1992 en el 2,2 por ciento del PIB y no el 1,6 por cien propuesto por el Gobierno, y 150.000 millones aumentando la recaudación del impuesto de sociedades.

Los 850.000 millones de pesetas adicionales así ingresados se repartirían, a partes iguales, entre infraestructuras, transferencias a las comunidades autónomas y las corporaciones locales, y mayor protección social.

Espasa aseguró que el proyecto de Presupuestos presentado por el Gobierno se inspira en un "liberalismo asistencial" que sacifica el desarrollo de las infraestructuras, a pesar de constituir éstas el principal "cuello de botella" de la economía española.

No obstante, reconoció, como mejoras introducidas en los Presupuestos del Estado para 1992, la universalización de las 14 pagas a los pensionistas, el incremento de 26.000 a 30.000 pesetas para las pensiones asistenciales, la equiparación de la pensión de viudedad con la mínima de jubilación sin cónyuge a cargo y el mantenimiento de la cláusula de salvaguarda para todas la retribuciones públicas.

Por otra parte, el portavoz de IU criticó la insistencia del ministro de Economía, Carlos Solchaga, en responsabilizar al excesivo crecimiento de los salarios de que el empleo vaya a crecer este año en 80.000 puestos de trabajo, en vez de los 200.000 previstos por el Gobierno.

A juicio de Espasa, los trabajadores serían "masoquistas" si se empeñaran en "generar el paro que ellos mismos padecen". También acusó a Solchaga de sumarse a la "contrarrevolución" fiscal de Thatchr y Reagan.

GASTOS EN "PASIVOS"

Por su parte, el portavoz de CDS, José Ramón Lasúen, afirmó que la población inactiva (enfermos, parados, pensionistas y rentistas) recibirán 11,5 billones del gasto público de la Administración Central en 1992.

Esa cantidad representa el 49 por cien de los gastos consolidados del Estado, la Seguridad Social y los organismos autónomos para todo el ejercicio.

Añadió que el gasto "compasivo" en la población pasiva crecerá el año que viene un 17,62 por ciento, n tanto que el "productivo" lo hará al 8,97 por cien.

A su juicio, los presupuestos tienen un carácter "preelectoral" que hacen marchar a la economía española "por encima del filo de la navaja".

Para Lasuén, estos presupuestos sólo tiene partidarios entre el PSOE, pero no lo apoyan los demás partidos ni la patronal y los sindicatos.

"El pasotismo del ciudadano medio, la pérdida de confianza empresarial y la hostilidad sindical pueden tener consecuencias negativas sobre el ahorro, la inversió, la recaudación y la tensión social", afirmó.

(SERVIMEDIA)
24 Oct 1991
M