Así lo manifestaron hoy el secretario de Medio Ambiente del Departamento de Movilidad de CCOO, Llorens Serrano, y el secretario de Acción Sindical de la Federación de Transportes, Comunicaciones y Mar de UGT, Eduardo Hernández, en la Comisión no permanente de Seguridad Vial y Prevención de Accidentes de Tráfico del Congreso de los Diputados.

Durante su intervención, Serrano afirmó que cerca del 70% de los accidentes de tráfico laborales son "in itinere" y añadió que, para reducir la siniestralidad, "es fundamental impulsar un cambio moral y actuar en seguridad vial desde los planes de prevención de riesgos laborales".

Serrano indicó que estos planes de movilidad favorecerían a las empresas porque reducirían la siniestralidad y suelo industrial destinado a los aparcamientos, y propuso que se "estimule fiscalmente una movilidad basada en el transporte colectivo y público".

Por otro lado, Eduardo Hernández destacó que un plan sectorial de riesgos laborales que incluya la seguridad vial debería abordarse desde "el diálogo social" y destacó que las empresas tienen que valorar "el accidente 'in itinere' como un riesgo laboral más".

Hernández calculó que cerca de un tercio de los fallecidos en la carretera el año pasado tuvieron relación con "accidentes laborales" y que en estos casos debería presentarse el inspector de trabajo al lugar de los hechos.

POSTURA DE LA CEOE

Por su parte, el presidente del Consejo Empresarial del Transporte de CEOE, Lorenzo Chacón, replicó a los representantes sindicales que las empresas no pueden asumir la responsabilidad de los accidentes "in itinere". "Ojalá pudiésemos los empresarios asumir esa responsabilidad. Son políticas de Estado, no políticas de empresa", zanjó.

Para reducir los accidentes "in itinere" y en misión, Chacón propuso "la promoción y el estímulo del transporte público por parte de las administraciones públicas", en lo cual las empresas colaborarán "con campañas de sensibilización para la reducción de la contaminación y de la siniestralidad".

Chacón descartó que se establezcan "nuevas obligaciones que son ajenas al ámbito de la empresa y que entran en la esfera personal del trabajador, como es la libre elección del medio de desplazamiento hasta el lugar de trabajo".

Chacón no aceptó que a las empresas se las achaque un aumento de la contaminación por el traslado del trabajador en vehículo privado y consideró que establecer planes obligatoriosque las responsabilice de los accidentes "in itinere" producirían "falta de competitividad y problemas para el empleo".