En un comunicado, la Federación Nacional de Metal, Construcción y Afines (MCA) de UGT-Catalunya mostró su "más enérgica protesta" ante este cierre y pidió a la multinacional que "reconsidere su decisión", a que esta planta tiene "aproximadamente" unos 700 trabajadores, entre los casi 500 empleados fijos de plantilla, 150 contratados por ETTs y 50 de servicios.

UGT incidió en que la empresa "tiene beneficios económicos, una productividad que se sitúa dentro de los parámetros de las empresas de su sector y no ha sufrido ningún tipo de conflictividad desde su creación".

Mientras, CCOO señala que la base argumental de la empresa, que aduce razones económicas, "demuestra su falta de sensibilidad social. El sindicato denuncia que lo único que busca Samsung es reducir sus costes laborales trasladando su producción a los países del Este de Europa.

CCOO de Cataluña afirma que "deslocalizaciones salvajes, como el caso que nos ocupa, demuestran que estas decisiones están planteadas desde el simple punto de vista depredador. Estas decisiones de las multinacionales se toman a miles de kilómetros de los centros de trabajo con total impunidad y sin tener en cuenta a los trabajadores".

Los sindicatos hanconvocado una asamblea para este sábado, día 17, en Sabadell, con el fin de analizar la postura de la empresa y determinar las acciones a llevar a cabo. Reclaman a la Generalitat y a los partidos políticos que "rechacen estas actitudes de las multinacionales".