Campos dijo a Servimedia que una ley de financiación asegurará que la LOE contará con fondos durante su aplicación, con independencia de los "vaivenes económicos que pueda haber en su desarrollo".

"Así se blindaría mucho más el tema presupuestario, porque la memoria no garantiza el dinero en un marco de recesión económica", añadió Campos, que se mostró partidario de que la ley se negocie entre el Gobierno y las comunidades autónomas.

En este sentido, vaticinó el fracaso de la reforma educativa si el ministerio no elabora una ley de financiación y el Estatuto de la Función Pública Docente, y si no se alcanza la cifra del 6% del PIB en gasto educativo, en la línea de los países europeos.