El responsable de Administración Pública de CCOO en Alicnte, Juan Cruz, manifestó que ellos no se niegan "a que se ejerza un control sobre las bajas médicas, pero consideramos innecesario que se tenga que realizar por parte de un entidad privada, ya que el Servicio Valenciano de Salud (Servasa) cuenta con los medios suficientes para hacerlo".

Según datos de CCOO, hasta el momento un total de 300 inspectores del Servasa venían realizando este control en la Comunidad Valenciana, de los cuales alrededor de 80 ejercían en la provincia de Alicante y bajo su cometencia se encontraban los 20.000 empleados públicos de la provincia alicantina.

Juan Cruz considera que "este paso del servicio público al privado puede incluso no ser constitucional, ya que una persona privada no tiene por qué llamar a un domicilio particular para comprobar el estado de la persona que esté de baja laboral".

CCOO denunció también el incumplimiento por parte de la Generalitat de los acuerdos alcanzados en 1990 y en 1992, en los que se preveía la constitución de una comisión paritria de salud laboral, formada por representantes de la Administración y de los sindicatos, para controlar el absentismo en los puestos de trabajo y las bajas laborales.

CCOO entablará un diálogo con la Generalitat y en el caso de que no revoque esta decisión no descarta la adopción de algún tipo de medida de presión.