El ERE presentado plantea el despido de 163 trabajadores de un total de 175, con lo que la plantilla de la empresa quedaría en 12 empleados. Además, ha estabecido la indemnización mínima prevista en el Estatuto de Trabajadores, que supone 20 días de salario bruto por año de servicio.

Para CCOO, la finalidad del ERE "no es garantizar la viabilidad futura de la empresa", tal y como establece el Estatuto y la jurisprudencia, "pues resulta imposible que con una plantilla de doce trabajadores sea viable una empresa que desarrolle actividades de televisión y radio digital".

El sindicato suscribe el núcleo central del texto de las alegaciones en el que se idica que "no estamos ante un ERE propiamente dicho, sino ante un cierre empresarial encubierto con la finalidad, no de hacer viable una empresa, sino de alcanzar otros objetivos como evitar que las Administraciones ejecuten los avales que tiene suscritos Quiero TV y que alcanzan varios miles millones de pesetas y no perder todas las concesiones administrativas que le fueron adjudicadas en su día y le serían retiradas en el supuesto de un cese total de actividad".

Para el Comité de Empresa de Quiero TV si el consejo de administración decidió el pasado 26 de abril el cierre de la plataforma fue debido a "los sucesivos errores de los accionistas y a los intereses políticos que existían".