CCOO, que elaborará una alternativa conjunta con UGT, está dispuesta a aeptar el mantenimiento de los contratos temporales de interinidad, obra o servicio, eventual por circunstancias de la producción, en prácticas y para la formación.

Para estos dos últimos, no obstante, propone un cambio de filosofía, que los convierta en "contratos de transición" a una plena integración en el mundo del trabajo, con la garantía de que terminarán dando lugar a contratos fijos.

CCOO también es partidaria de incluir dentro de los contratos indefinidos los realizados a tiempo parcial, ue ahora pueden ser fijos o temporales. Defiende igualmente la potenciación de los contratos fijos-discontinuos, en lugar de los eventuales, para los sectores con un alto grado de estacionalidad, como el turismo, el campo y la hostelería.

TOPES A LA CONTRATACION TEMPORAL

Según explicaron en rueda de prensa el secretario general de CCOO, Antonio Gutiérrez, y la secretaria de Empleo del sindicato, Salce Elvira, su objetivo es reducir el porcentaje de contratos temporales en relación a la población asaariada desde el 32 por cien actual hasta el 11 por cien, que es la media de la CE.

Con ese fin, CCOO defiende el restablecimiento de los antiguos topes a la contratación temporal por empresa, establecidos por un decreto de 25 de julio de 1982, con anterioridad a la llegada del PSOE al gobierno.

Esos topes limitaban el número de contratatados temporales al 10 por cien de los empleados fijos, para las empresas con más de 1.000 trabajadores; al 15 por cien, en las empresas con más de 500 trabajadore; al 20 por cien, para las empresas con más de 250 empleados; al 25 por cien, para empresas con más de 50 trabajadores; y al 50 por cien, para empresas con menos de 50 empleados. En este último caso podía llegar hasta el 100 por cien previa comunicación a la Dirección Provincial del INEM.

Antonio Gutiérrez afirmó que CCOO no aceptará el informe de los expertos como base de discusión en la negociación con el Gobierno de la reforma de las modalidades de contratación, cuyo inicio consideró urgente. "El Gbierno no es árbitro de la situación sino el principal responsable y tiene que dar la cara en la negociación ya", apostilló.

Gutiérrez señaló que, pese al buen trabajo de investigación que le precede, las conclusiones de dicho informe son "lamentables y contradictorias" y se limitan a avalar la política de empleo seguida por el Gobierno socialista. A su juicio, da toda la imprensión de que las conclusiones estaban dictadas "a priori".

Para CCOO, el principal defecto del informe de los expertos esque "sacraliza la contratación temporal" y abre la puerta a las agencias privadas de colocación, al proponer la legalización de las empresas de trabajo temporal.

A su juicio, las únicas recomendaciones positivas, pero insuficientes, son la persecución del encadenamiento de contratos temporales y la regulación más estricta de los contratos para la formación y en prácticas.

En los próximos días, CCOO consensuará su propuesta de reforma del mercado laboral en los próximos días con UGT. La coincidenca básica de ambas centrales es rechazar el contrato temporal de fomento del empleo. En 1989 se suscribieron 1.112.800 contratos de este tipo.