El sindicato señaló que los fallecimientos en jornada de trabajo crecieron un 8,8%, mientras que los 'in itinere' crecieron un 17%. Respecto al tipo de accidentes, baja un 11,1% las muertes de las personas autónomas y crece un 12,8% el de las personas asalariadas.

"Como venimos señalando en los anteriores avances de estadísticas, se aprecia que las causas de accidentes mortales que experimentan un incremento más acusado son las relacionadas con los riesgos de seguridad clásicos y fácilmente prevenibles, como las caídas con un 8,2%, los atrapamientos, aplastamientos y amputaciones con un 11,3% o los golpes con objetos que con un 94,7% casi duplican las cifras del año pasado", denunció el secretario de salud laboral y sostenibilidad medioambiental del sindicato, Mariano Sanz Lubeiro, quien señaló que la siniestralidad crece en sectores como el de los servicios (11,5%), industria (11,1%) o la construcción (6,6%).

“Puede sonar reiterativo, pero no nos queda más remedio que insistir en el deterioro de la prevención en las empresas españolas. Tenemos que volver a recordar el papel de la subcontratación y de la falta de coordinación de actividades empresariales en estos altos niveles de siniestralidad. Y tenemos que volver a denunciar públicamente que se ha extendido modelo de gestión preventiva basado únicamente en la cumplimentación de trámites administrativos y no en evaluaciones de riesgos rigurosas y en la adopción de medidas preventivas eficaces", señaló Sanz, quien recordó la importancia de exigir a las autoridades de exigir un mejor control.

SUBEN UN 1% LOS ACCIDENTES

Asimismo, el sindicato recordó que en los diez primeros meses del año se han producido 530.675 accidentes de trabajo con baja, un 1% más que en el mismo periodo de 2023. Por tipología, el aumento de los accidentes durante la jornada de trabajo fue del 0,5% mientras que los accidentes 'in itinere' se incrementaron un 4,1%.

Además, los accidentes con baja también crecieron un 1,3% para las personas asalariadas, mientras que bajó un 4% para las autónomas. Por último, el índice de incidencia de los accidentes con baja, que refleja la siniestralidad relativa expresada en número de accidentes por cada 100.000 personas ocupadas, mostró un ligero descenso del 1,9%.