Rodríguez, que calificó de "auténtica salvajada" el hecho de que algunas enfermeras estén haciendo estos turnos, consideró que serían necesarios unos 200 ó 300 profesionales enfermeros más para mejorar la situación de estos nuevos centros.

El dirigente sindical anunció que CCOO está en negociaciones con UGT para fijar el calendario de movilizaciones que los dos sindicatos preparan para la segunda quincena de mayo, en protesta por "el desastre" al que, en su opinión, el consejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Juan José Güemes, está llevando a la sanidad de la región.

Con estas movilizaciones, explicó el dirigente de CCOO, los sindicatos pretenden "modificar el desastre al que nos está conduciendo Güemes, que en lugar de dialogar (con las fuerzas sindicales) está más interesado en resolver los problemas internos de su partido".

Y es que, agregó Rodríguez, los nuevos hospitales madrileños, aparte de problemas de médicos y enfermeros, tienen también dificultades con el suministro de materiales médicos, proporcionados por empresas privadas.

En una rueda de prensa para presentar un libro sobre "Los profesionales de la salud en España", CCOO denunció también que Madrid tiene problemas igualmente en Atención Primaria, en la que hasta hace poco no había listas de espera y donde ahora la espera para obtener cita con el médico o el pediatra ronda los tres o cuatro días.

En los casos más graves, continuó, la espera que deben soportar los madrileños para poder ver a su médico de Primaria es de siete u ocho días.

Ante esta situación, la secretaria de Política Social de CCOO Madrid, Ana González, reiteró que Comisiones Obreras exige la articulación de un pacto social por la sanidad pública madrileña, que garantice el consenso y aborde retos como la mejora de la Atención Primaria, donde, aseguró, sería necesario crear "al menos 70 centros de salud" para atender las necesidades de los ciudadanos.

Del mismo modo, subrayó González, este pacto social por la sanidad pública madrileña debería articular un "plan de medidas urgentes" capaz de mejorar la situación en las listas de espera quirúrgicas y de especialistas.

Por último, Comisiones Obreras denunció el decreto que modifica la estructura de la Consejería de Sanidad, ya que aunque está de acuerdo con "la desaparición del Instituto de Salud Pública como fórmula de gestión", no lo está con que el texto no haya creado una Dirección de Salud Pública que dirija y coordine la salud pública madrileña, "fundamental para prevenir epidemias y garantizar buenas condiciones de salubridad".