Así lo expresó Espejo durante su participación este lunes en una Asamblea del sindicato en Cataluña y, posteriormente, en una concentración ante la patronal autonómica Foment, donde también se exigió la aprobación inmediata de la reducción de la jornada laboral a 37,5 horas que ahora negocia el Ministerio de Trabajo con los agentes sociales y que, por el momento, no cuenta con el apoyo de la CEOE ni de Cepyme.

Pero sobre el sector cárnico, químico y textil, la representante de CCOO acusó a las patronales de tener en la negociación un comportamiento que impide avanzar en derechos y en salario.

“La negativa de las patronales sectoriales a avanzar en la negociación hasta que no se aclare cómo quedará la reducción de jornada, llevó a este sindicato a anunciar que habrá conflicto en otoño si no hay dignidad”, denunció CCOO.

Al grito de “huelga, huelga, huelga”, la secretaria general de CCOO de Industria anunció que las 518.000 personas que trabajan en los sectores del textil, de la química y de las cárnicas están llamadas a sumarse a la movilización que el sindicato pretende convocar a partir del mes de septiembre.

El objetivo de estas protestas es, según el sindicato, “desbloquear la negociación colectiva y forzar a las patronales a regresar a las mesas con la firme voluntad de alcanzar acuerdos satisfactorios para los trabajadores y trabajadoras”.

UNA NEGOCIACIÓN DIFÍCIL

En cuanto a la situación de estos sectores, CCOO señaló que en la industria química, una actividad en la que trabajan algo más de 290.000 personas en toda España, la negociación del convenio sectorial está siendo “complicada”.

La patronal, que acaba de confirmar que no recurrirá la sentencia de la Audiencia Nacional que le obliga a subir los salarios de todas las personas trabajadoras un 10,3%, se “aferra a recortar derechos” y se plantea no incrementar las nóminas este año o hacerlo por debajo de las cifras que se pactaron en el Acuerdo para el Empleo y la Negociación Colectiva (AENC). “En definitiva, pretende ganar en la mesa de negociación lo que no fue capaz de ganar en los tribunales”, reprobó el sindicato.

La situación no es muy diferente en la negociación de los convenios de cárnicas y del textil. En la primera, que afecta a 127.000 personas, la patronal va más allá de las directrices de la CEOE ya que, según CCOO, rechaza las mejoras que los sindicatos han puesto sobre la mesa de negociación y se niega a incorporar al articulado del convenio ninguno de los avances que el Gobierno ha introducido en la normativa laboral.

Finalmente, lamentó que las patronales del textil y de la confección tampoco lo estén poniendo “nada fácil”. A su criterio, dificultan el objetivo de CCOO de acabar con la brecha salarial de género en un sector donde trabajan 100.000 personas, profundamente feminizado y que paga “los peores salarios” de la industria.