El Decreto 64/1995 regula que en los terrenos forestales, estén o no poblados de especies arbóreas, y en la franja de 500 metros que los rodea no se puede encender fuego, sea cual sea la finalidad.

Especialmente, no se pueden quemar restos de poda, de aprovechamientos forestales, agrícolas o de jardinería, ni márgenes próximos a zonas forestales. Tampoco se pueden hacer fuegos de recreo ni otros relacionados con la apicultura.

Dentro de las áreas recreativas y de acampada y en parcelas de las urbanizaciones, se podrá hacer fuego cuando se utilicen barbacoas de obra.

También queda prohibido tirar objetos encendidos; verter basura y restos vegetales e industriales de cualquier clase que puedan ser la causa del inicio de un fuego; lanzar cohetes, fuegos de artificio u otros artefactos que contengan fuego, así como utilizar sopletes o similares en obras realizadas en vías de comunicación próximos a terrenos forestales.

Cuando las circunstancias meteorológicas sean de riesgo alto, muy alto o extremo, el Departamento catalán de Medio Ambiente y Vivienda puede establecer medidas extraordinarias y prohibir encender cualquier tipo de fuego, incluida la utilización de fogones de gas, barbacoas de cualquier clase o fumar en terrenos forestales. En esta situación todos los permisos que se hayan dado para hacer fuego quedan sin efecto.

En los casos en que se prohíba hacer hogueras, el Cuerpo de Agentes Rurales informará, a partir de ahora vía SMS, a todas las personas que tengan permiso para hacer fuego.

Este sistema permite que en caso de riesgo de incendios miles de personas que tienen permiso para quemas agrícolas o de pastos se enteren rápidamente de la prohibición.