Carod-Rovira hizo estas declaraciones durante un desayuno informativo organizado por la Confederación Española de Directivos y Ejecutivos, en el que respondió por videoconferencia a preguntas planteadas por miembros de esta asociación en Madrid, Barcelona, Bilbao, Mallorca y Sevilla, entre otras.

El líder de Esquerra Republicana afirmó que Cataluña debe dar "psos muy importantes hacia adelante" en estos próximos cuatro años para lograr lo que hasta ahora no ha podido conseguir, como un nuevo sistema de financiación y un nuevo estatuto catalán.

Reconoció que la necesidad de un pacto de gobierno con al menos otra formación política limitará sus posibilidades de cumplir el programa electoral. "Estoy convencido de que, en cuatro años, Cataluña no va a proclamar la independencia, no se me asusten; pero tampoco en cuatro años se va a establecer la sociedad sociaista en Cataluña", dijo.

Carod-Rovira puntualizó, no obstante, que Esquerra Republicana afronta esta legislatura desde una posición "más modesta" como "tercer polo" de la política catalana. Y advirtió de que en las elecciones autonómicas de 2007 su formación política irá "a por todas".

PEOR QUE EN LA TRANSICION

A su juicio, la relación del Estado español con las instituciones catalanas ha empeorado considerablemente a lo largo de estos 25 años de democracia, en especial, apuntó, desde que gobiena el Partido Popular.

"Estábamos mejor en los primeros años de la transición, cuando la derecha democrática española y la izquierda democrática española eran conscientes de la mala conciencia que generaba el franquismo que no en la situación que tenemos hoy en algunos terrenos concretos", sentenció.

Carod-Rovira denunció "el estilo, las maneras de hacer y la forma de concebir el Estado español" que tiene el Partido Popular y se mostró convencido de que la actitud de José María Aznar ha contribuio a que haya "más independentistas en Cataluña, más nacionalistas en Euskadi y quizá más republicanos en España" que el trabajo desarrollado por PNV, CiU y ERC.

Acusó a Aznar de construir un "Estado excluyente" en el que cada vez existen más personas, entre las que dijo encontrarse, que se sienten "incómodas". "Si tal y como somos, no tenemos cabida en este Estado, me pregunto qué es lo que estamos haciendo todavía aquí", apostilló. "Tenemos la sensación de que la política de este Estado es un obstácuo para nuestro bienestar".

El presidente de ERC hizo un guiño al secretario general del PSOE, José Luis Rodríguez Zapatero, al preguntarse si existe un partido en la oposición que sea capaz de presentar un modelo de Estado "distinto" al que defiende el Partido Popular.

UN NUEVO ESTATUTO

Carod-Rovira afirmó que Cataluña necesita "nuevos intrumentos políticos y económicos" como un nuevo estatuto y un nuevo sistema de financiación con los que mejorar el bienestar de los ciudadanos.

Entre otra cosas, permitiría la puesta en marcha de vuelos transoceánicos desde Barcelona, el impulso de la investigación, el reforzamiento de la enseñanza de idiomas en las escuelas, la mejora de la formación profesional, la promoción de horarios labores que ayuden a conciliar la vida familiar, la apertura del mercado comercial a Europa del este y el norte de Africa y el control de la inmigración.

El líder de ERC explicó, no obstante, que, entre la aprobación de un nuevo estatuto y de un nuevo sistema de finaniación, es "prioritario" lo segundo porque sin más ingresos será difícil que Cataluña asuma más competencias.

A su juicio, debe ser el gobierno de la Generalitat quien recaude los impuestos, quien los administre e incluso quien establezca la "cuota de solidaridad" con el resto del Estado español.

"No es tanto cuánto Cataluña va a pedir como cuánto no se va a ir", agregó. "Es muy importante que entremos en una dinámica de cooperación en la cual cada uno se vaya espabilando".

El nuevo estatutodebería especificar, según dijo, las fórmulas de relación de Cataluña con las instituciones de la Unión Europea, debería incluir un "pacto por la laicidad" por el que nadie pueda ser excluido a partir de su religión y que permita controlar los flujos migratorios.

El político independentista abogó por "mimar" a los pobres autóctonos de Cataluña antes que a los inmigrantes necesitados para evitar que surja un "nazismo latente" en la sociedad catalana.