CATALANAS. PUJOL ADVIERTE DE QUE UNA DERROTA DE CiU RESTARA CAPACIDAD DE INFLUENCIA A CATALUÑA SOBRE MADRID

- Afirma que Maragall y Fernández son los candidatos de Ferraz y Génova, y se deben a us partidos

MADRID
SERVIMEDIA

El presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, advirtió hoy de que una derrota de CiU en las próximas elecciones catalanas del 17 de octubre restará capacidad de influencia a Cataluña sobre el Gobierno de turno en Madrid, porque los candidatos del PSC, Pascual Maragall, y del PP, Alberto Fernández, se deben a sus respectivos partidos de ámbito nacional.

Pujol hizo estas manifestaciones tras la presentación del informe elaborado por Fundes sobre"La imagen de Cataluña en España", que tuvo lugar en el Casino de Madrid. El presidente catalán también tiene previsto asistir posteriormente a la presentación de la Guía Repsol de Cataluña.

En su larga intervención ante los medios de comunicación, Pujol se negó en un principio a entrar en materia electoral, pero acabó insinuándo primero, y afirmando contundentemente después, que una victoria de su máximo adversario político en estos comicios sería fatal para las expectativas de Cataluña.

A su jucio, el candidato del PSC "no va a tener la posibilidad de influencia en Madrid" que tiene CiU porque es "un hombre supeditado a Ferraz", igual que el candidato del PP "está supeditado a Génova".

Sólo CiU puede garantizar a los ciudadanos catalanes que Cataluña seguirá siendo decisiva en la orientación de la política del Ejecutivo central desde la "independencia" y sin servidumbres de partido que condicionarán la visión de España que tenga un posible presidente de la Generalitat no nacionalista.

ara ilustrar este argumento, Pujol recordó que CiU ha estado comprometida con el mantenimiento de la estabilidad económica y política de España desde el inicio de la transición con gobiernos de UCD, PSOE y PP sucesivamente.

Afirmó que este tipo de actitud sólo puede mantenerse desde la independencia de CiU, con una voluntad clara de contribuir al desarrollo conjunto de toda España y manteniendo un estricto respeto a la voluntad mayoritaria del electorado español que, por ejemplo, en 1996 convirtió en l partido más votado al PP, aunque no le dio la mayoría.

JUEGO DE MANOS

Según Pujol, en esa ocasión CiU hubiera podido hacer un "juego de manos" que, aritméticamente, hubiera servido para darle el gobierno al PSOE, pero en virtud de ese respeto los convergentes pactaron con el PP evitando así un "gran error de consecuencias gravísimas".

"Cataluña ha hecho algo que sólo puede hacer el nacionalismo que nosotros representamos. Ni antes, ni ahora, ni en el futuro lo podrán hacer ni los socialistas,ni el PP catalán, porque ellos se deben a sus partidos y no lo pueden hacer. Ester servicio a la estabilidad que hemos hecho nosotros no lo podrían hacer los demás, porque están al servicio de sus partidos y de su concepto de España", sentenció Pujol.

Reconoció que la colaboración de CiU con los gobiernos centrales de turno perdería valor si la coalición dejara de gobernar en Cataluña porque "perdería un peso" que ahora tiene añadido al simple número de diputados con que Convergència cuenta en el Congeso de los Diputados.

Por todo ello, el presidente de la Generalitat confía en que los ciudadanos de Cataluña vuelvan a elegir a CiU como el mejor garante de los intereses de la comunidad autónoma y perfecto estímulo para el progreso del conjunto de España.

PRESIDENTE DIALOGANTE

El presidente de UDC, Josep Antoni Durán Lleida, que acompañaba a Pujol en su primera visita a Madrid desde que se convocaron las elecciones autonómicas, insistió en argumentar que si vence Maragall "los catalanes perdeán un presidente dialogante con el Gobierno de Madrid" y grarante de la independencia del Ejecutivo de la Generalitat.

Durán arremetió contra el candidato socialista por haber dicho días atrás que los catalanes se arrepentirán si Pujol repite victoria. Le achacó un escaso talante democrático y advirtió de que un éxito electoral del PSC será un "desengaño" para los ciudadanos de Cataluña.

Hizo un paralelismo entre la campaña de Maragall y la del SPP en Alemania que, a su juicio, ha provocado un hodo desengaño en los germanos, que han llegado a la conclusión de que "el cambio por el cambio" no tiene "fundamentos" ni un "contenido real" que pueda significar el desarrollo de un proyecto político sólido.

En cuanto a las relaciones entre ambos socios de la coalición, Durán dijo que todas las diferencias están zanjadas y que su participación junto a Pujol en los más importantes actos de la campaña electoral está garantizada.

(SERVIMEDIA)
14 Sep 1999
SGR