El cardenal Carles salía así al paso de la polémica suscitada por el editorial del "Full Parroquial" ("Hoja Parroquial") publicado por las diócesis de Vic, Tarragona, Solsona y Girona, en el que se exige a los catellanoparlantes que aprendan catalán.

El prelado manifestó tras la sesión inaugural de la Asamblea Plenaria de la Conferencia Episcopal Española, que se celebra esta semana en Madrid, que prefería no profundizar en la polémica antes de escuchar a todos los obispos catalnes.

Sin embargo, indicó que la polémica suscitada fuera de Cataluña por la publicación del editorial "resulta exagerada" para los residentes en esa comunidad, ya que aseguró que "hay muchísima más paz en el pueblo, también en el pueblo creyente, de lo que ciertas noticias han traslucido".

Ricard María Carles señaló que los prelados catalanes atienden "a cada uno (de sus fieles) dentro de nuestras posibilidades de la manera que nos parece mas justa".

Respecto al manifiesto suscrito por 350 itelectuales y profesionales catalanes en el que se pedía que el catalán sea lengua oficial única en la comunidad autónoma, que inicialmente firmó un obispo auxiliar de Barcelona, el cardenal confirmó que su auxiliar retiró su firma del manifiesto al constatar la polémica que había suscitado.

"Un auxiliar mío retiró su firma", explicó el arzobispo de Barcelona, "porque cuando él se adhirió la situación ambiental era muy distinta, después con la tensión creada él pensó que como obispo tenía que estar almargen de esa declaración y así lo hizo".

Por su parte, el obispo portavoz de la Conferencia Episcopal Española, José Sánchez, restó importancia a la tensión que suscitó la publicación del editorial del "Full Parroquial".

José Sánchez apuntó que los obispos catalanes habían matizado el contenido de la hoja parroquial y añadió que "no es un tema que tenga mayor relevancia. Pienso que la tormenta ha pasado ya".