En declaraciones a un grupo de periodistas antes de inaugurar la Semana Internacional de la Moda de Madrid, la titular de Educación afirmó que es "evidente" que estos profesores se pagan con dinero público.

Sin embargo, aseguró que ni la Administración central en el caso de los docentes de Primaria ni las autonmicas en lo referido a los profesores de Secundaria tienen margen para intervenir en las listas de nombres que compete confeccionar a la Iglesia "de acuerdo con sus criterios".

"Otra cosa es la reflexión y mediación que puede hacer el Gobierno respecto a esta decisión", explicó. "Yo, personalmente, me estoy interesando por este caso ante la Conferencia Episcopal, pero desde un punto de vista legal, tal y como está establecido el desarrollo de los acuerdos que derivan del Convenio con la Santa Sede, elprocedimiento es el que es".

La ministra insistió en que el asunto es "muy complejo" y la hipótesis de una revisión de la situación actual es complicada "porque deriva de los acuerdos con la Santa Sede". "Estamos hablando de un tratado internacional y no es una situación para ventilar así como así", afirmó.