La Aesan había instado a las comunidades autónomas, a través de la Red Nacional de Alerta Alimentaria, a inmovilizar dos lotes de este producto distribuido por la firma "Cátaro-Nopal, S.L.", al detectarse irregularidades en la inscripción de esta empresa en el Registro General Sanitario de Alimentos e Industrias Alimentarias.

Las indagaciones sobre este producto se iniciaron a raíz de que el pasado 2 de abril, las autoridades portuguesas comunicaran a través de la Red de Alerta Europea para Alimentos (RASFF) la sospecha que "Depuralina" pudiera haber producido efectos adversos -anafilaxis y hepatotoxicidad- en tres consumidores del país vecino, según se explica en un comunicado regional.

Actualmente, ni en la Agencia Española de Seguridad Alimentaria y Nutrición ni en el Centro Nacional de Epidemiología se tiene constancia alguna de afectados en España.