Según esas mismas fuentes, Roldán habría sacado de España en los últimos veinte días informes y documentación coprometida para actuar con ventaja en esa negociación.

Para Romero, Luis Roldán está actuando como si pidiera un rescate al Gobierno, ya que "no quiere comerse el marrón en la década del pelotazo y no quiere ser el único chivo espiatorio del caso".

Antonio Romero aseguró también que hubo un contacto el pasado lunes entre un miembro del Gobierno y Luis Roldaán, pero al parecer la oferta del alto funcionario no convenció al ex director del instituto armado, que rechazó entregarse.

El diputado d IU cree que la decisión de sacar informes fuera de España responde a que Roldán "se siente traicionado a todos los niveles" y más "cuando a su paso por la comisión de investigación se le ha dejado solo. Un hombre solo no puede hacer lo que hizo (él) al frente de la Guardia Civil".

Romero, que cree que Roldán "está resguardado no tras sacos terreros, sino tras carpetas y dosieres", dijo que el "caso Roldán" ha hecho un "daño terrible" a la imagen de España y de Europa, y ha provocado la crisis polític más grave de este periodo democrático.

Para el diputado de IU, ésta "es una crisis de credibilidad en los mecanismos normales del sistema democrático, más grave que el cambio de estrategia que siguió el PSOE con el referéndum de la OTAN o en las sucesivas huelgas generales".