Esto casi duplica el resultado de una encuesta similar realizada en 2005, en la que sólo el 15% de los participantes afirmaron que venderían o intercambiaran los presentes navideños.

Según la encuesta de 2006, a pesar de que un 71% de los participantes consideraban un placer hacer regalos, y la mitad lo veían como una tradición, un 44% reconoció que nunca hacía regalos a sus amigos; un tercio tampoco tenía esa atención con su familia política, y la cuarta parte no incluía a sus hermanos en la lista de regalos navideños, mientras que el 25% de los mayores de 50 años no regalaba nada a sus propios hijos. No obstante, las ventas navideñas están garantizadas en el país vecino. Un 48% de los internautas indicó que gastarían una media de 250 euros o más en obsequios, mientras que el 19% afirmó que destinaría entre 200 y 249 euros a este fin, aunque el 40% de los encuestados reconocía adquirir objetos lo más baratos posibles. En contra de lo que cabría esperar, el comercio electrónico no constituye el lugar preferido para las compras navideñas de los internautas franceses, que de momento siguen prefiriendo las tiendas con página web (69%), seguidas de los motores de búsqueda y las tiendas on-line sin establecimientos al público.

Los sitios de subastas como e-Bay quedaron en quinto puesto como lugar de compras, ya que los encuestados los consideran sobre todo como un lugar donde encontrar objetos raros, de colección o para el intercambio.