De ellas, 2.195.000 foraban parte de los parados estadísticamente registrados como tales, en tanto que los restantes 1.849.000 pertenecen a colectivos no considerados oficialmente como desempleados.

El mayor contigente de los demandantes excluidos de las listas de paro, un total de 595.000, está formado por personas que se apuntaron al INEM para encontrar un segundo empleo o para compatibilizar con otro el que ya tienen.

Además, 289.000 son eventuales agrícolas beneficiarios del subsidio especial por desempleo que está percibiéndolo o que, pese a haberlo agotado, no ha transcurrido un periodo superior a un año desde el día del nacimiento del derecho.

Otros 227.000 son estudiantes, a los que no se reconoce como parados hasta que dejen los estudios, y 130.000 son demandantes de trabajos de una duración inferior a 20 horas semanales, entre otros colectivos.

Por otra parte, los datos del INEM muestran que más de la mitad de los contratos realizados entre enero y agosto de este año eran temporales con una duración nferior a los seis meses, circunstancia que explica la alta volatilidad de las cifras de paro registrado, como ha puesto de manifiesto su brusco aumento de octubre.

A este respecto, los contratos indefinidos registrados en el INEM entre enero y agosto, aunque aumentaron un 2,9 por cien respecto al año pasado y se situaron en 172.143, supusieron sólo el 3 por ciento del total.

El 65,4 por cien de los registrados eran eventuales por circunstancias de la producción, de los que se hicieron 1.735.329;por obra o servicio, de los que se suscribieron 1.588.418, o de interinidad, 312.468.