Siempre según esas interpretaciones, José María Aznar dejaría gobernar a Pujol en minoría hasta ver si, tras las elecciones de marzo, amas formaciones necesitan mútuamente de apoyo parlamentario, CiU en la Generalitat y Aznar en la Presidencia del Gobierno español.

En declaraciones a Servimedia, Alvarez Cascos calificó de "libres" las interpretaciones que se están haciendo en base al mensaje "el PP no pondrá ningún obstáculo a la gobernabilidad", que el pasado lunes lanzó la Dirección de los populares en Cataluña y el martes asumió la Ejecutiva Nacional.

Según el `número dos del PP, hay que ir por pasos y lo primero es constituirla Mesa del nuevo Parlamento y elegir a su presidente, para lo cual hay abiertos "diversos frentes" de negociación con todos los partidos.

El PP acude a esos contactos con la premisa de que CiU ya no tiene mayoría y es necesario `visualizarlo' en las instituciones.

"Quien no tiene mayoría en el Parlamento no puede tener mayoría en la Mesa, en el Consejo de Administración de la Radiotelevisión catalana o en el órgano rector de la Sindicatura de Cuentas", advirtió el dirigente nacional del PP.

Este principio general, prosiguió Alvarez Cascos, no lleva a "una única distribución" y será la negociación entre los grupos parlamentarios la que diga "la última palabra", dijo en un intento por matizar las informaciones que hablan de un inminente entendimiento PP-CiU.

"La Mesa puede tener una representación minoritaria de Convergéncia, pero esa representación puede ser con CiU presidiendo el Parlamento o sin CiU presidiendo el Parlamento", comentó en referencia al supuesto pacto Aznar-Pujol para cedr la Presidencia de la Cámara a un nacionalista.