La nueva ordenación urbanística -cuya aprobación definitiva corresponde al Consejo Insular de Mallorca- mantiene la calificación urbanística de la edificación.

La duquesa de Badajoz realizó hace años unas obras de reforma, que técnicos municipales denunciaron, al no acogerse al PGOU vigente entonces. El expediente resolvió quedichas obras de ampliación de la vivienda debían ser demolidas.

El propio Tribunal Supremo ratificó dicha orden de demolición que, no obstante, fue recurrida por Doña Pilar de Borbón. El Ayuntamiento de Palma pretendía "ampliar" la calle donde se encuentra ésta y otras fincas, en el popular barrio palmesano de "El Terreno".

Para ello, se debería producir un derribo de parte de las edificaciones afectadas. Al mismo tiempo, la duquesa de Badajoz hizo levantar una tercera planta sin disponer de los ermisos municipales pertinentes, con lo que la situación urbanística de la residencia de la hermana del Rey planteaba problemas que debían ser resueltos con "la pala excavadora", señaló en su día un portavoz municipal.

En el texto del actual PGOU se determina la legalidad de todo el conjunto, ya que resuelve que para la ampliación de la calle el derribo de esa edificación "ya no es necesario, porque tampoco las necesidades de tráfico así lo requieren".