A través de un centenar de imágenes, correspondientes a otros tantos artistas españoles y extrnjeros, se plantea un acercamiento al proceso creativo de la ilustración, "sin tratar de hacer historia del género, sino explicar su esencia y desvelar sus posibilidades expresivas y comunicativas", según los organizadores.

Se incluyen ilustraciones difundidas a través de producciones editoriales de las más diversas tipologías, desde cuentos ilustrados a cómics, álbumes de cromos, libros de divulgación gráfica y libros infantiles de imágenes.

Según Teresa Duncan, comisaria de la muestra, el géner del álbum es el gran protagonista de la exposición, "porque en él la proporción de la imagen es prioritaria respecto al texto y, al contrario de lo que ocurre en el libro ilustrado, su objetivo es la comunicación visual, no la oral o la literaria".

La exposición se divide en cuatro apartados, integrados por cincuenta módulos que en algunos casos se estructuran mediante juegos que incitan a la participación y estimulan la observación del visitante.