Al cumplirse el segundo aniversario de su reunión con dirigentes etarras, Carod Rovira reconoció que sintió "un gran alivio" cuando en el Parlamento se aprobó el inicio de conversaciones con ETA, una vez que ésta abandone las armas, porque así se refuerza la apuesta por el diálogo para lograr la paz que él adoptó hace dos años.

El líder de ERC manifestó que el balance en estos dos años ante un posible fin de la violencia terrorista es "positivo" porque "no ha habido ninguna víctima mortal de ETA en ninguna parte".

Además, indicó que está a la espera "no tanto una tregua temporal, parcial, sectorial, sino del anuncio definitivo del final de la violencia y del terrorismo, como sistema para defender una idea".

Carod Rovira confesó que, aunque en principio pensó que dos años eran "suficientes" para que ETA anunciara el final de la violencia, ahora reconoce que esto aún no se producirá. No obstante, se mostró seguro de que esto ocurrirá antes de las próximas elecciones municipales, cuya celebración está prevista para mayo de 2007.