LA CAPACIDAD DE APRENDIZAJE Y EL TRABAJO EN EQUIPO, LO QUE MAS VALORA UNA EMPRESA PARA CONTRATAR A UN RECIEN LICENCIADO
- Según un estudio de la Universidad Carlos III sobre los valores y competencias más valorados
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La capacidad de aprendizaje y el trabajo en equipo son las competencias que más valora una empresa a la hora de contratar a un recién salido de la universidad, según revela un estudio de la Universidad Carlos III sobre la identificación de los valores y competencias demandados en el mercado profesional a titulados universitarios.
Los encargados de la selección de personal de las empresas también valoran la responsabilidad en el trabajo, la actitud y optimismo, y la flexibilidad o capacidad de adaptación a nuevos entornos. Otras capacidades a tener en cuenta son la orientación al cliente y la capacidad de resolver los problemas.
Sin embargo, cuestiones como el conocimiento de una lengua extranjera no son tan demandadas a la hora de acceder a un primer empleo como pudiera parecer, a no ser que se trate de una multinacional o una empresa con proyección en el exterior. Tampoco la capacidad de liderazgo o de negociación son valores que se requieran a un recién salido de la universidad.
Otra competencia que sí es importante para las organizaciones es la fidelidad a la empresa, un valor que no estaba recogido en el cuestionario inicial de este estudio pero que sí ha sido reflejado por los encuestados.
En la presentación del estudio, Jesús Gallego, director gerente de la Fundación Universidad Carlos III, recalcó que para acceder a un primer empleo es básico e imprescindible la formación universitaria, "pero no suficiente".
Además de un buen expediente universitario y de haber estudiado en una buena universidad, se pone el foco en otras competencias transversales como son el trabajo en equipo y la capacidad de aprender. Esas competencias, añadió, suponen mayor formación continua y estudios complementarios.
UN NUEVO SISTEMA EDUCATIVO
Para José Manuel Torralba, vicepresidente ejecutivo de la Fundación Universidad Carlos II y vicerrector de Investigación, este estudio confirma la necesidad de adaptar la enseñanza universitaria a las nuevas directrices que marca la declaración de Bolonia.
Dicha declaración se basa en la construcción de un sistema de educación superior europeo con titulaciones comparables que amplíen las oportunidades de trabajo de los estudiantes, permitan una mayor movilidad y aumenten la competitividad internacional del sistema educativo europeo.
Según este nuevo sistema de educación europeo, que deberá iniciarse en España en octubre de 2007, la enseñanza a través de clases presenciales deberá reducirse en favor de otro tipo de formación basado en competencias transversales como las que recoge este estudio.
Ese nuevo sistema, añadió Carlos Navarro, vicerrector de Conversación Europea, es la oportunidad de que se incluyan este tipo de habilidades que señala el estudio en cursos específicos. "Lo importante es que aprovechemos esta oportunidad para modificar los contenidos y la forma de enseñar", señaló.
Tener un sistema educativo superior equiparable en toda Europa supondrá "un cambio muy radical", insistió Torralba. No se podrán mantener las 25 o 30 horas de clase presencial semanales que en la actualidad tienen los universitarios españoles; será necesario aumentar el número de tutorías y el contacto entre alumno y profesor, y tener grupos más pequeños.
Será una educación distinta, más racional y moderna, que requerirá el esfuerzo de alumnos y profesores y la financiación necesaria, concluyeron los responsables de la Universidad Carlos III.
(SERVIMEDIA)
25 Abr 2005
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