Así, a lo largo del sábado, 3 de enero, la Patrulla de Desarrollo Sostenible repartió 742 bombillas en el stand del Centro de Investigación del Medio Ambiente, mientras que el domingo, 4, se entregaron 608, según informó hoy el Ejecutivo regional.

De esta manera, la iniciativa "El desafío continúa" ha distribuido, desde el pasado 24 de noviembre, 82.236 bombillas de bajo consumo en los municipios de Camargo, Castro Urdiales, El Astillero, Laredo, Los Corrales de Buelna, Piélagos, Reinosa, Santa Cruz de Bezana, Santander, Santoña y Torrelavega.

Con esta medida se pretende reducir el gasto energético de los hogares de Cantabria a través de la incorporación de bombillas de bajo consumo.

Para ello, las consejerías de Medio Ambiente e Industria y Desarrollo Tecnológico, en colaboración con el Instituto para la Diversificación y el Ahorro de la Energía (IDAE), dependiente del Ministerio de Industria, distruyeron estos dispositivos en las principales localidades cantabras por segundo año consecutivo.

Las bombillas emiten una luz cálida (amarilla), tienen una potencia de 14 watios (equivalentes a 75 watios de una bombilla incandescente tradicional) y una vida útil de unas 3.000 horas.

Gracias a su mayor duración y a su menor consumo, permiten un ahorro de unos 60 euros en la factura de luz a lo largo de su vida útil, así como una reducción de las emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.