"Personas que el Tribunal Supremo ha dicho que han delinquido, que han llevado a cabo acciones corruptas, que han financiado ilegalmente a su partido, es indigno que estén sentadas en el esaño de cualquier Cámara representativa", afirmó Grosske.

El dirigente de IU añadió que el abandono del escaño por parte de Cañellas es indisociable del caso del túnel de Sóller y del deterioro político que ha sufrido el ex presidente balear a causa de la sentencia de ese sumario.

A su juicio, no es cierto que Cañellas deje el Parlamento por discrepancias con el Gobierno balear, como ha afirmado, porque existe la posibilidad de promover enmiendas y el ex jefe del Ejecutivo tiene suficientes recurss para ponerlas en marcha. Según Grosske, el argumento de Cañellas es solamente una excusa para encubrir su convicción de que el PP va a perder los próximos comicios autonómicos.

"Es una retirada táctica frente a esta derrota" indicó. "El no quiere que se pueda decir que la causa de la derrota es su presencia en las listas, por ejemplo, y lo que quiere es decirle a Matas: 'mira, siempre que yo me he presentado como candidato hemos ganado, tú te presentas y es la primera vez que perdemos'".

En su pinión, lo que pretende el ex presidente balear es recuperar posiciones dentro del partido, sobre la base de la derrota electoral del próximo mes de junio, que su propia dimisión hace más probable en el sentido de que va a tener un efecto desmovilizador y de imagen de crisis en el seno de esta formación política.