Sn embargo, Maria Antonia Munar, presidenta de UM, explicó hoy a Cañellas el contenido de la reunión del Consejo Político de su partido que se celebrará el próximo lunes, en el que se debatirá la ruptura del pacto firmado antes de las últimos comicios locales y autonómicos entre PP y UM y que permite la gobernabilidad en las principales instituciones de Mallorca.

Munar indicó que "en el partido hay ambiente de ruptura y a eso no me puedo oponer". Fuentes del partido estiman que sólo un 10 por ciento dela militancia de UM estaría en contra de romper el pacto con el PP.

El presidente balear explicó que "por nuestra parte nunca se dirá que tuvimos ganas de romper esta relación, por lo que quienes deben estar preocupados son ellos y no yo".

Cañellas señaló que aunque numéricamente el PP perdería la mayoría absoluta en el Parlament Balear, "en las votaciones dudo que UM se oponga o incluso llegue a favorecer una moción de censura", indicó.

La ruptura del pacto obligaría al abandono inmediato d todos los políticos de UM que ocupan cargos en las instituciones, como Bartomeu Rotger, consejero de Cultura y Educación, "a quien no permitiría estar en mi gobierno si antes no renuncia a su partido, en el caso de confirmarse la ruptura del pacto", señaló Cañellas.

Rotger todavía no se ha decidido y espera al lunes para manifestarse. Quien sí lo tiene claro es Bartomeu Oliver, concejal de Servicios Sociales en el Ayuntamiento de Palma, quien asegura que no abandonará el consistorio.

En el Ayuntmiento de Palma "la gobernabilidad está más que asegurada", indicó hoy el alcalde Juan Fageda. El PP se quedaría, en el peor de los casos, con 15 concejales frente a 14 de la oposición.