Los beneficios brutos superaron los 5.500 millones, el doble que el año anterior. Según explicó hoy el presidente de Campofrío, Pedro Ballvé, este incremento se ha conseguido al mejorar la facturación un 17,6%, con lo que se situó en 80.476 millones de pesetas. Deesta cantidad, 17.411 millones procedieron de las filiales de la empresa española en el exterior.

Campofrío tiene empresas productoras filiales, algunas de ellas en 'joint-venture' con sociedades locales, en República Dominicana (situada en la zona franca), Filipinas, Mexico, Argentina y Rusia.

Ballvé indicó que 1995 ha sido un año "difícil" por el retraimiento del consumo, pero indicó que su empresa ha salvado el ejercicio por los crecimientos en las ventas experimentados donde tiene filiales. Además, anunció la terminación para el próximo mes de junio de una nueva fábrica en Burgos, en la que Campofrío ha invertido 5.000 millones de pesetas, con el objetivo de aumentar las exportaciones a los países europeos. La estrategia de la empresa es exportar y cuando ésto no sea rentable, crear filiales.

El presidente de Campofrío negó los rumores sobre la salida de la familia Ballvé de la empresa y también rechazó que él personalmente esté intentando vender el paquete que el BCH posee en la cárnca (más de un 20%), como asegura la entidad financiera.