Estas entidades presentaron hoy un paquete de medidas que piensan llevar a cabo contra la carga impositiva de estos recibos, que consideran exagerada.

Jordi Torredemer, director de la Organización de Consumidores y Usuarios de Cataluña (OCUC), afirmó que "nosotros no damos facilidades para el cobro del recibo del agua y lo atrasamos, evidentemente al máximo. En el caso de Barceona vence el segundo trimestre de aquí a unos días. Tenemos un margen de tiempo para ver si realmente estas negociaciones se cumplen".

Los impulsores de la campaña no descartan, sin embargo, que si no se resuelve el problema acaben recomendando a los usuarios que no paguen los recibos. En este extremo, señalan que asumirían la defensa de los abonados que se nieguen a pagarlos.

El objetivo de esta campaña es conseguir que se eliminen del recibo del agua las tarifas que no tienen nada que ver con e consumo, es decir que el usuario deje de financiar las obras hidráulicas con el canon incluido en las facturas.

Para las entidades de consumidores y sindicatos, estas obras deberían ir a cargo de los presupuestos de la Generalitat.