En declaraciones a Servimedia, Zarco indicó que el cambio de hora puede hacer que los más susceptibles a las modificaciones horarias, como quienes tienen trastornos de ansiedad o depresión, noten más irritabilidad, cambios de humor o dificultades para conciliar el sueño.

Además, aparte de los pacientes con problemas de ansiedad o depresión, pueden notar pequeños cambios de humor los más sensibles a estas modificaciones horarias, que no tienen por qué ser personas mayores ni niños. Las molestias que sienten algunos ciudadanos por el cambio de hora no van asociadas a enfermedades ni edades, apuntó Zarco.

En cualquier caso, el presidente de Semergen quiso dejar claro que este cambio de hora es "demasiado sutil y pequeño como para generar trastornos de importancia".

Las modificaciones horarias que a su juicio pueden conllevar problemas más acusados de salud son las que sufren quienes realizan viajes transoceánicos o cambian su turno de trabajo con frecuencia.