En el primer trimestre del año la economía ha crecido un 0,3%, y un 2% en términos interanuales, según los datos del Banco de España conocidos esta semana. El Gobierno ha dicho que hasta julio no revisará el cuaro macroeconómico.

Las Cámaras mantienen que en el primer trimestre del año el consumo "ha mantenido la apatía de los últimos meses y la inversión ha continuado presentando síntomas de moderación", mientras que "la producción industrial mantiene tasas negativas debido a la debilidad de las exportaciones y la subida de los precios energéticos".

En cuanto a la demanda externa, tanto las exportaciones como las importaciones se han visto afectadas por la desaceleración económica mundial y, aunque la uerra de Iraq ha terminado, "aún persisten incertidumbres" como la caída del dólar, la volatilidad del petróleo o el provocado por la neumonía atípica, que puede lastrar el comercio internacional.

Con esta situación el sector servicios "se ha visto perjudicado", como lo demuestran indicadores como el transporte de viajeros por avión y el turismo procedente de otros países.

EMPLEO

Las Cámaras alertan de que la inflación en España continúa siendo elevada en comparación al resto de países de la UE lo que "perjudica las ventas en ese mercado".

Por contra, los datos del empleo han sido "mejor de lo esperado" según los datos de la Encuesta de Población Activa, lo que "refleja la capacidad de la economía española de mantener un ritmo elevado de creación de empleo, a pesar de las dificultades que atraviesa el entorno internacional y la moderación del crecimiento interno".

Durante el segundo trimestre de este año las Cámaras esperan que la finalización de la guerra en Iraq "implique una mejora e la confianza" de los agentes económicos. Sin embargo, para todo el año "las nuevas incertidumbres que han surgido en el panorama internacional pueden afectar a la actividad económica, lo que dificultaría un crecimiento superior al 2,5%".