Norniella dijo que el euro es una gran oportunidad para las empresas españolas, pero también supone imortantes retos, y opinó que, junto a la necesaria adaptación operativa que deben acometer las empresas a causa del cambio de moneda, habrá que asimilar una nueva forma de hacer negocios.

En éste sentido, apuntó, el euro traerá consigo importantes implicaciones estratégicas, y con una trascendencia aún mayor que los propios cambios en el funcionamiento de las empresas, como todo lo que afecta a las facturas, equipos informáticos, etc.

El presidente de las cámaras de comercio agregó que el nuevo cocepto de negocios que los empresarios deben tener en cuenta a partir de ahora es que España estará en un entorno de estabilidad económica, pero el resto de competidores europeos también; y que el mercado natural de nuestras empresas ya no será sólo el español sino el de la Unión Europea.

Asímismo, destacó que las empresas van a tener que operar en un contexto de mucha mayor transparencia de precios, porque se va a trabajar sólo con una moneda en la mayor parte de los países de la Unión, y dicha divisa se va a convertir en habitual para las relaciones comerciales internacionales, más allá de la propia Unión Monetaria Europea.