Todos ellos, afirma Camacho en una nota del Grupo Socialista del Senado, fueron atendidos por el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), cuyos servicios de asistencia social y jurídica, prestados por ONG especializadas, proporcionan información y orientación a los inmigrantes.

Camacho respondió a las acusaciones del senador del PP Ignacio Cosido, referidas a que habían existido graves irregularidades en la devolución de, al menos, tres inmigrantes subsaharianos, razón por la cual el parlamentario popular solicitaba la comparecencia urgente del ministro de Interior en el Senado.

Según precisa José Miguel Camacho, ninguno de los 73 inmigrantes que fueron devueltos a Marruecos, al entrar en Melilla asaltando la valla que delimita el perímetro fronterizo, estaba documentado.

"Ninguno de ellos, por lo demás, pidió asilo en España ni manifestó su intención de hacerlo, ni ante la abogada que les asistió, ni durante las diligencias policiales, ni mientras permanecieron en el Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes", añade la nota del Grupo Socialista.

Las seis personas, cuatro de Costa de Marfil y dos de Malí, por las que se interesó el Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Refugiados (ACNUR) tras haber manifestado, una vez devueltas a Marruecos, que su intención había sido la de solicitar asilo en España, tuvieron una nueva oportunidad de concretar dicha intención en su comparecencia ante el juez, al haber sido solicitada la medida de internamiento.

En ese procedimiento intervino el propio juez, el ministerio fiscal, el secretario judicial y, como asistente jurídico, un letrado distinto al que les asistió en el expediente de devolución. Por tanto, el procedimiento de devolución, destaca Camacho, se ajustó a lo establecido en la normativa vigente, correspondiendo, en su caso, a los jueces la decisión sobre su adecuación a derecho.