En una entrevista a la Cadena Ser recogida por Servimedia, Nadia Calviño dijo sobre el 'caso Rubiales' que el “orgullo de alegría que nos dio” la selección española de fútbol femenino no se puede “dejar que se eclipse por el comportamiento de una persona impresentable”.

Un representante público institucional “no puede tener determinados comportamientos, expresiones y tiene que ser consciente de su papel, y de la representación internacional de España”. Calviño cree que “algo positivo tiene que salir de aquí, porque España ya no acepta este tipo de comportamientos y expresiones machistas” y estima que eso es muy positivo “de cara al futuro”.

Preguntada por el cambio de seleccionadores, argumentó que “esto tiene que desembocar en un cambio de actitudes” por parte de todos aquellos que están en el mundo del deporte porque “es un espejo muy importante para la ciudadanía”. Pero quiere que ser campeonas del mundo “nos sirva de inspiración para que las niñas y las mujeres jóvenes vean que sí que se puede llegar al máximo”.

A raíz de los casos de violencia machista de este último miércoles en Béjar (Salamanca) y Alzira (Valencia), Calviño subrayó que la evolución en España es “más favorable que en otros países europeos”. En España tenemos “desde hace muchos años” un registro muy estricto de este tipo de comportamientos, que en otros países no existe y de hecho aseveró que “nuestro país es considerado un ejemplo en el sentido, de tomarse en serio la violencia de género".

Considera también que no se puede “decir una cosa y hacer lo contrario”. “Si nos parece importante la lucha contra la violencia de género no se pueden eliminar las Consejerías de Igualdad, no se pueden reducir los presupuestos para proteger a las mujeres que pueden estar en situación de riesgo. Hay que ser coherente”.

En opinión de Calviño, en el conjunto de la sociedad española “es un clamor y quiere que sigamos luchando contra esta lacra con todos los instrumentos a nuestra disposición”.