En una rueda de prensa junto al ministro de Finanzas alemán, Christian Lindner, tras la reunión mantenida, Calviño fue preguntada sobre los topes a los precios del gas que va a estudiar la Comisión Europea, atendiendo así una petición del Gobierno español, y respondió que es una de las medidas a estudiar junto a otras recogidas en la comunicación de la Comisión Europea esta semana.

Calviño valoró “muy positivamente” que Bruselas haya incluido varias iniciativas del Gobierno español como esa para “poner fin al chantaje energético al que nos tiene sometidos Putin” o el refuerzo de las interconexiones energéticas, y expuso que se van a analizar “intensamente a todos los niveles en los próximos días”. Así, señaló que entre hoy y mañana tiene lugar un Consejo Europeo informal y en las próximas semanas habrá una cita formal. “Espero que en próximas semanas podamos avanzar porque para nosotros es absolutamente imprescindible adoptar una medida que frene la escalada de precios”, destacó.

La vicepresidenta quiso añadir que “los distintos países tenemos circunstancias diferentes” e instó a trabajar teniendo en cuenta “cuál es la posición" de cada socio y con “unidad y determinación”.

Calviño explicó que en la reunión mantenida con el ministro alemán se compartió la necesidad de reducir la dependencia energética en el gas de la Unión Europea respecto al resto del mundo, la “conveniencia de aprovechar el potencial” de España en regasificación, reforzar las interconexiones energéticas y acelerar el despliegue de las renovables.

La vicepresidenta puso en valor las rebajas fiscales en la electricidad anunciadas por el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la semana pasada, como la prórroga hasta junio del descuento del bono social eléctrico para personas vulnerables y de los tipos más reducidos para la energía o la reducción del 80% de los peajes para consumidores electrointensivos, y destacó que tienen un impacto sobre las arcas públicas “mínimo” de 10.000 a 12.000 millones de euros.

En cuanto a las sanciones impuestas a Rusia, Calviño afirmó que están teniendo un impacto “significativo” sobre la economía rusa y que el objetivo es que sirvan para parar la guerra al tiempo que se minimice el impacto negativo sobre la economía europea. Recordó que en esta misma semana se han reforzado las sanciones y se han extendido a Bielorrusia.

Por otra parte, al ser preguntada sobre la definición de las reglas fiscales en función del país, Calviño insistió en que se aborde el asunto “desde un punto de vista de realismo y pragmatismo” y comentó que su “impresión” es que ésta es la visión del resto de países europeos.